top of page
Buscar

Retrospectivas: Un must en contingencias

Ya hemos hablado bastante sobre cómo el contexto mundial ha cambiado nuestra forma de trabajar y también, nos está afectando a nivel personal. Y es que al estar de forma remota, tener reuniones online y tratar de emular nuestra rutina profesional a un nivel digital -como muchos de ustedes deben estar haciéndolo hoy en día-, también está contrarrestado con las distracciones de lo “doméstico”, las que se vuelven cada vez más frecuentes, y quizás, no contamos con lo necesario para trabajar de la forma que quisiéramos.


Lo anterior, sin duda, puede ser bastante incómodo, lo que nos lleva a la pregunta, ¿cómo lo abordamos?


Tuckman nos enseña que los equipos pasan por niveles de desempeño y ciertamente los cambios nos pueden hacer retroceder a estados no performantes. Si bien este modelo data de los sesenta, éste retrata muy bien cómo sigue siendo la dinámica de los equipos: primero el forming -donde se creen conocer-, luego el storming -cuando son guiados pero se empiezan a mostrar cómo realmente son-, seguido por el norming -momento en donde ya se comunican como tales. Todo finaliza cuando llegan al performing, siendo ésta la etapa clave para alcanzar los objetivos.


Por consecuente, y pensando en cualquier equipo que ya estaba en el último paso, el hecho de estar fuera de la rutina diaria hace que esta performance no se dé tal y como la pensábamos. Por ende, ¿estamos perdiendo momentum? Por cierto que sí. En este sentido, la clave es generar belonging, o sentido de pertenencia y esto, se logra haciéndolo a nivel persona, como primer paso.


Paralelo a lo anterior, podemos ver cada vez más espacios online de conversación o más bien catarsis, donde la persona pasa a ser un elemento central de la contingencia y puede expresar sus emociones y sentimientos. Esto es fundamental para el proceso de reconstrucción de equipos en base a lo propuesto por Tuckman.


Sin embargo, todo el marco conceptual que vimos anteriormente y el sentido de pertenencia no sirven de nada si no aprendemos algo de él. Por ende, las retrospectivas toman un rol fundamental a la hora de ver qué pasa e incluso, nos ayudan a dilucidar el estatus de la persona y las futuras acciones y/o medidas a tomar. En este sentido, y muy por el contrario de lo que los países buscan con el Coronavirus, la idea es que la curva de optimismo y compromiso siga subiendo exponencialmente.


En cuanto a las preguntas de la retro, algunas ideas válidas para construirla son:

  • ¿Qué es lo que ocupa el 80% de tus pensamientos diarios?

  • ¿Identificaste aquellas cosas que no te permiten trabajar concentrado?

  • ¿Qué hemos aprendido de esta cuarentena?

  • ¿Qué cosas que podemos hacer para sentirnos satisfecho y conformes?

Sin duda, debemos volver a focalizar la retrospectiva como una herramienta poderosa en tiempos de crisis, siempre considerando que ésta deberá tener un enfoque en lo humano, ya que ésto nos ayudará a recuperar la tranquilidad para continuar, volver al performing de Tuckman y adaptarnos según los aprendizajes a esta nueva realidad laboral en la que nos encontramos.

 
 
 

Comments


Commenting on this post isn't available anymore. Contact the site owner for more info.

Todos los derechos reservados

Black Hat SpA

2024

  • LinkedIn
bottom of page